Valencia con niños-El Oceanográfico-Parte 6

En el artículo anterior os contaba lo felices que se veía a los niños disfrutando del Oceanográfico de Valencia, pero lo dejamos a medias, por eso continuo con el relato de la visita en este artículo.

Plano del Oceanográfico de Valencia.

Como siempre os digo, viajar con niños requiere ciertos "sacrificios" como dedicar días de viaje o partes de los mismos a satisfacer sus necesidades, aunque en el caso de Oceanográfico, la visita es igual de interesantes con ellos que sin los más pequeños.

Oceanográfico de Valencia.

Humedales (4):

En esa esfera se representa los Humedales.

Aves que habitan los Humedales.

Una espectacular esfera de 26 metros de altura simula dos de los ambientes de zonas húmedas más singulares del planeta: el manglar americano y el marjal mediterráneo.

Los galápagos leprosos y las carpas también cohabitan en la zona.

Espátula rosada de los Humedales.

Aunque realmente son ecosistemas muy distintos, su base ecológica es la misma, ya que los dos son zonas húmedas, cercanas a la costa dónde, con agua dulce mezclada con la salada, creando ambientes únicos en flora y fauna.

Puedes acercarte pero nunca tocar las aves.

Precioso ejemplar de pato colorado.

La cúpula y la densa vegetación permite la existencia de posaderos, la construcción de nidos y la adopción de refugios por parte de los animales como el galápago leproso, la garceta común, el pato colorado, la espátula rosada, y la ibis escarlata.

Este mozo por poco pica a Joel.

Ibis escarlata.

Océanos (6):

Oceanográfico de Valencia, Océanos.

Pez sierra.

Con un volumen de 7 millones de metros cúbicos, estamos ante el acuario de mayores dimensiones del Oceanogràfic y uno de los más grandes del mundo.

Yolanda en el túnel.

Túnel de los Océanos del Oceanográfico.

Representa un viaje por el océano Atlántico desde las Islas Canarias hasta las Islas Bermudas, a través de un túnel transparente de 30 metros donde contamos con especies como el tiburón toro, el tiburón gris, la raya, la anguila marina, el pez luna, entre otras.

A Izan le encantó.

Tiburón del Oceanográfico.

Aquí los niños fliparon en colores con el número y tamaño de los animales más espectaculares de este acuario: Tiburón toro, Tiburón gris, Pez obispo,  Águila marina, Pez sierra, Musola, Raya,  Pez luna...etc.

Raya.

Aquí pudieron observar de cerca las características morfológicas y el comportamiento de las diferentes especies.

Ballena a tamaño real. los niños alucinaron con el tamaño.

Antártico (9):

Pingüinos del Antártico.

Una colonia de pingüinos Papúa es la protagonista de esta recreación de un acantilado rocoso con áreas de puesta y cría. Existe una parte sumergida donde se observa nadar casi sin esfuerzo a estos divertidos pájaros bobos, con sus gráciles movimientos bajo el agua, que en este medio no lo son para nada.

Ártico (7):

Iglú del Ártico del Oceanográfico.

Una gran cúpula con forma de iglú de 12 metros de altura acoge la zona del Ártico. En ella, acantilados rocosos y bloques de hielo representan el hábitat la región ártica donde viven morsas y belugas, uno de los mamíferos marinos más singulares del planeta y que dejaron flipados a los niños.

Belugas en el Ártico.

Islas (11):

Izan y Yolanda en las Islas.

Zona al aire libre, donde grandes colonias de leones marinos de la Patagonia nos sorprenden en un hábitat que representa las islas situadas a lo largo de la costa sudamericana.

Un león marino nadando.

Izan y Joel se acordaron de la vez que tuvimos la oportunidad de nadar con leones marinos en Tarragona donde tuvimos la oportunidad de tocarlos.

Leones marinos tomando el sol.

Mar Rojo-Auditorio Submarino (10):

Mar Rojo-Auditorio.

Gran sala rematada con una cubierta en forma de “concha de peregrino”. En el interior se encuentra el auditorio, con capacidad para 466 personas y cuyo telón de fondo es un espectacular acuario que representa el mar Rojo.

Delfinario (8):

Delfinario.

Se trata del delfinario más grande de Europa y de uno de los delfinarios más grandes del mundo, con 26 millones de metros cúbicos de agua, una profundidad de 11 metros y gradas para cobijar a más de 2.000 personas .

Los delfines obedecen todas las órdenes de sus cuidadores.

Con un total de cinco piscinas, esta instalación puede albergar una treintena de delfines. La piscina de exhibición, de entrenamiento, reproducción y cuidados médicos.

Saltos y más saltos.

Los delfines mulares, los más comunes en la zona costera, con un tamaño máximo es de casi 4 metros de longitud, son los protagonistas de este espacio.

Espectacular la inteligencia de estos mamíferos marinos.

Aprovechamos los asientos del delfinario para descansar, así que una media hora antes de que empezara el espectáculo estábamos ya sentados aprovechando el momento para almorzar, pues la visita nos había abierto el apetito.

Delfines saltando.

Ahora sólo queda disfrutar de sus saltos y acrobacias, que entusiasmaron a los niños, los verdaderos protagonistas de la visita.

Dos delfines impulsando a un instructor por los aires.

Al igual que ocurrió con los leones marinos, Izan y Joel recordaron nuestro viaje por Turquía donde tuvieron la ocasión de tocar y nadar con delfines, lo mismo que nosotros en nuestra visita a la Rivera Maya, donde también pudimos nadar con los delfines, algo realmente espectacular.

Oceanográfico de Valencia.

En resumen, que pese al mal tiempo (menos mal que no nos llovió) pasamos medio día en el Oceanográfico de lo más satisfactorio, y pese a ser nuestra tercera visita allí, disfrutamos mucho viendo a los niños como se lo pasaron, ya que en las anteriores ocasiones eran demasiado pequeños para recordar...como dice Terminator: "Volveré".