Habíamos pasado la tarde de ayer en el
Barrio de Montmartre y la mañana de hoy en la
Torre Eiffel y alrededores hasta que se hizo hora de comer.
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Frente a los Inválidos hay un gran jardín con el mismo nombre. |
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El edificio de Los Inválidos es enorme. |
Después de la comida cogimos el metro hasta la parada
Invalides, justo frente al
Palacio Nacional de los Inválidos (Hôtel National des Invalides), del s. XVII en estilo barroco, uno de los monumentos más importantes de París y que debería estar en vuestra agenda.
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Desde los Inválidos se ve la Torre Eiffel. |
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Joel flipó con el tamaño de este cañón. |
Recordad que la entrada a este monumento y al resto de los que nombraré en este artículo están incluidas en el
Paris Museum Pass que podéis adquirir en la
Tienda de Francia.
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Patio de los Inválidos.
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El imponente edificio está formado por el complejo del Hôtel des Invalides, que acoge varios museos (el Museo del Ejército de París, el Museo de la Orden de la Liberación y el Museo de Historia Contemporánea de París.) y está plagado de referencias históricas al pasado militar francés, aunque nosotros debido a la falta de tiempo no visitamos ninguno, una gran Iglesia y, además alberga el mausoleo con los restos del emperador Napoleón, principal razón de nuestra visita.
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Había dos avionetas de la guerra expuestas... |
En un principio, el Palacio Nacional de los Inválidos fue ideado por orden del rey Luis XIV como residencia para los soldados franceses retirados del servicio, es decir, para que los veteranos de guerra que no tuvieran casa pudieran tener un lugar donde vivir, eso sí, sólo los que habían pertenecido a la armada durante más de 10 años, o los que habían tenido la mala fortuna de sufrir heridas graves durante el combate.
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...y ambas realmente preciosas. |
Así que, en el año 1674, empezaron a llegar los primeros huéspedes de los Inválidos (más de 4.000 a finales de siglo) al edificio levantado por el arquitecto Jules Hardouin-Mansart, que se dedicaban a servir a Francia de otro modo como reparando uniformes, zapatos, etc.
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Iglesia Saint Louis des Invalides o San Luis de los Inválidos. |
La
Iglesia Saint Louis des Invalides o San Luis de los Inválidos, tardó unas cuantas décadas más estar terminada (1677-1706), y fue edificada para servir al rey y a los soldados, aunque debían acceder al templo por lugares diferentes, ya que se divide en dos partes para que tanto militares como realeza pudieran asistir a las mismas misas sin tener que mezclarse.
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Cúpula bajo la que descansa Napoleón. |
La otra parte de la iglesia se llama
Iglesia del Domo o Église du Dôme, y era en esta donde asistía a misa la familia real.
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Los restos de Napoleón descansan aquí. |
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Sarcófago de Napoleón Bonaparte. |
Es esta iglesia la que posee la preciosa y gran cúpula dorada de 100 metros de altura que puede ser vista desde muchas partes de París, y es bajo ella donde se guarda el sarcófago, realmente grande, con las cenizas de
Napoleón Bonaparte, un personaje realmente trascendente no sólo para
Francia sino para la historia de
Europa, rodeada de esculturas representando las grandes victorias del general francés.
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Los Inválidos, féretro de José Bonaparte. |
Aquí están custodiados también otros féretros de personalidades francesas relevantes, la mayoría emparentadas con Napoleón, como sus hermanos Jerónimo y José Bonaparte (que llegó a reinar en
España durante la ocupación francesa) o su hijo, Napoleón II, así como algunos de los mariscales más importantes de la historia militar francesa, como el mariscal Vauban, el mariscal Foch o el mariscal Lyautey.
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Plaza de la Concordia o Place de la Concorde de París. |
Una vez fuera del recinto volvimos a la misma parada de metro con la intención de ir al museo más importante de París, pero hicimos una parada intermedia para enseñarles a los niños la
Plaza de la Concordia o Place de la Concorde, la segunda más grande de toda Francia, situada entre los Campos Elíseos y los Jardines de las Tullerías, una de las plazas más representativas de París, ya que durante la Revolución Francesa fue el sangriento escenario donde se instaló la guillotina en la que fueron decapitadas más de 1.200 personas, entre ellas Maria Antonieta, el rey Luis XVI o Robespierre. En 1840 se colocó en el centro un enorme obelisco proveniente del templo egipcio de Lúxor, de más de 3.000 años de antigüedad, que fue donado por el virrey de
Egipto.
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París, Museo del Louvre o Museé du Louvre. |
Después, ya sí, nos acercamos al
Museo del Louvre,
Musée du Louvre, uno de los más visitados del mundo, ya que recibe más de nueve millones de visitantes al año. Pese a ello, es posible que para las personas que no estén demasiado interesadas en el arte, o como en nuestro caso las que vais a
viajar con niños, pueda convertirse en un lugar demasiado aburrido tanto por sus enormes dimensiones (dicen que es el más grande del mundo), como por el calor y las aglomeraciones de turistas.
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Los niños haciéndose las fotos típicas. |
Por ello, y pese a que los amantes del arte podrían pasar varios días recorriéndolo, nosotros sólo estuvimos una hora o quizás un poco más recorriendo sólo alguna de sus galerías.
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El Louvre es inmenso. |
Pero vayamos por partes...La colección del Louvre ha sido formada a partir de las colecciones de la monarquía francesa y las expoliaciones realizadas durante el imperio Napoleónico.
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Ala Richelieu del Museo del Louvre. |
El Museo del Louvre, que abrió al público general en 1973, se encuentra alojado en una fortaleza del siglo XII (ampliada y reformada en diversas ocasiones), el Palacio del Louvre, que fue usado con anterioridad por algunos monarcas como Carlos V y Felipe II como residencia real.
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Techos del Palacio del Louvre. |
Fue cuando se trasladó la residencia real al Palacio de Versalles cuando empezó a convertirse en museo.
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La Pirámide del Louvre. |
En 1989 se construyó una pirámide de cristal, la
pirámide del Louvre, rompiendo la monotonía de los grandes bloques grises del museo, que por su arquitectura vanguardista, generó controversia durante su instalación.
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Desde esta sala se accede a las 3 alas del museo. |
Consejos: Las obras están distribuidas en tres alas distintas que llevan el nombre de tres ilustres personajes franceses, Richelieu, Sully y Denon y se accede a cada una de ellas desde la gran sala que hay bajo la pirámide de cristal, de modo que para cambiar de ala, hay de salir a esa sala y entrar en otra ala.
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Ala Denon del Museo del Louvre. |
Cada una de las alas está compuesta por cinco plantas.
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Museo del Louvre. |
Entre las pinturas más importantes del museo merece la pena destacar las siguientes: La Gioconda de Leonardo da Vinci, La Libertad Guiando al Pueblo de Delacroix y Las Bodas de Canaá de Veronés.
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La Gioconda es la obra más importante del Louvre. |
Las tres están en el ala Denon, que fue en la que más gente había y donde más tiempo pasamos.
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Decenas de turistas se concentran frente a La Gioconda |
La Gioconda o La Mona Lisa, obra maestra de Leonardo da Vinci, es también la estrella del Louvre, y es aquí delante donde se agolpan decenas de turistas para admirar al misterioso retrato de la esposa de un mercader florentino, Francesco del Giocondo.
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Las Bodas de Canaá de Veronese. |
En esa misma sala, justo frente a La Mona Lisa, tenéis una de las grandes obras maestras de la pintura del siglo XVI,
Las bodas de Canaá, de Veronese.
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Museo del Louvre. |
Inspirada en las bodas venecianas de la burguesía, Veronese plasmó en aquí su particular interpretación de este episodio de la Biblia dando rienda suelta a su creatividad.
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Joel posando con figuras persas. |
Poco más os puedo contar del museo, ya que los niños y el tiempo (teníamos pocas horas para visitar París) nos impidieron hacer una visita más profunda.
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El Sena a su paso por París. |
Salimos del Museo del Louvre y nos fuimos caminando hacia la
Isla de la Cité o Île de la Cité (Isla del Asentamiento), en medio del río Sena, en pleno corazón de París, considerada como el antiguo centro de la ciudad, y donde se hallan nuestras siguientes visitas.
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Isla de la Cité en el corazón de París. |
El paseo desde el museo hasta allí transcurre al lado de Sena, de modo que aprovechamos para hacer unas fotos del río que cruza París y bajamos para pasear por su orilla.
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Ayuntamiento de París. |
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