Blogtrip a Alcoy. Alcoi Ciutat del Nadal.

Alcoy, provincia de Alicante, se ha convertido en nuestro destino favorito en la Comunidad Valenciana, pues ya la hemos visitado en cuatro ocasiones contando esta, y siempre disfrutamos mucho cuando lo hacemos, más si cabe cuando vamos de blogtrip, porque eso significa que además tenemos la compañía de otros miembros de la CVTB.

Alcoi Ciutat del Nadal.

Cada vez que Alicante Turismo Interior se pone en contacto con nuestra asociación, nos volcamos porque venir a estas tierras de la Costa Blanca es siempre un éxito asegurado.

El Hostal Savoy de Alcoy.

Empezamos el fin de semana con la cena de bienvenida para todos los asistentes (A mamá le gusta viajar, Con los niños en la mochila, La maestra viajera, Link Alicante, Los viajes de Héctor, Mochileros 2.0, Modo Traveller, y Un viaje mil aventuras), familias viajeras, en el Hostal Savoy, donde ya nos habíamos alojado cuando hicimos el blogtrip del cicloturismo en Alcoy.

Nuestra cena de bienvenida en el Hostal Savoy de Alcoy.

Siempre que hemos venido a Alcoy, hemos cenado aquí, y nunca nos han fallado, han estado a la altura en todo momento, tanto por la calidad de la comida, como por la atención y el servicio, de modo que seguro que repetimos.

Nuestra cena de bienvenida en el Hostal Savoy de Alcoy.

El menú fue a base de entrantes o tapas para compartir, y empezó con un surtido de ibéricos con queso curado acompañado de rebanadas de pan con ajoaceite y tomate a parte para restregar al gusto de cada comensal; seguido de una degustación de ensaladillas variadas; y de patatas Savoy con huevos rotos y jamón ibérico.

Nuestra cena de bienvenida en el Hostal Savoy de Alcoy.

Lo mejor de compartir mesa con otros locos viajeros como nosotros es escuchar, hablar y debatir de lo que más nos gustas, viajes y viajar, mientras continuábamos disfrutando de platos como fajitas de pollo thai con verduras; o calamar patagónico con verduras y all i oli suave; para terminar con un buen entrecot; bueno, eso en mi caso, ya que no soy muy de dulce y apenas probé el surtido de dulces del postre.

Lonja de San Jorge, cartel de cabalgata y teatro de Alcoy.

A la mañana siguiente teníamos una visita guiada por Alcoy, que empezaba en la Plaza de España, bajo la que está la Lonja de San Jorge, un gran espacio de hormigón y granito creado por el arquitecto valenciano Santiago Calatrava simulando el esqueleto de un animal que a nosotros nos recordó una barbaridad al Oculus de Nueva York, Estados Unidos, del mismo arquitecto.

Bloggers en la Plaça de Dins.

Fue entonces cuando nos enteramos del porqué la Navidad es tan especial en Alcoy, porqué el #AlcoiCiutatdelNadal, y es que esta fue la primera ciudad de España, de Europa y del mundo en la que se celebró la Cabalgata de Reyes en el año 1866 por lo tanto es la más antigua documentada, una cabalgata tradicional, que todavía hoy sigue sin carrozas de Bob Esponja o la Patrulla Canina, en la que se desborda ilusión cuando los pajes, los verdaderos protagonistas, reparten los regalos a los niños, subiendo con escaleras hasta las segundas plantas de los edificios por donde transcurre la cabalgata.

Alcoi, Iglesia de San Jorge.

La visitá pasó frente al Teatro, en el que a finales de Noviembre las representaciones del Betlem de Tirisiti, Bien de Interés Cultural, marca la llegada de la Navidad en Alcoy (os hablo después de Tirisiti) y llegó hasta la Iglesia de San Jorge, de 1921, dedicada al patrón de la ciudad.

Alcoy, Puente de San Jorge.

A escasos metros de allí tenemos el Puente de San Jorge, construido entre 1925 y 1931, para unir el casco antiguo con la zona nueva, siendo este puente de 42 metros de altura sobre el cauce del río Riquer y 156 metros de longitud, la construcción de estilo art déco más grande de España.

Alcoy, Puente de San Jorge.

También subimos a una de las torres de la antigua muralla de Alcoy, a la Torre de N'Aiça, del s. XIV, desde donde obtendréis las mejores vistas del Puente de San Jorge, del Barranco del Cint y del Campamento Real, ubicado en el edificio del antiguo Preventorio, donde suben los niños la mañana del 5 de Enero a ver cómo se envuelven sus regalos, y desde donde los Reyes Magos hacen su entrada solemne en la ciudad montados sobre sus camellos ya por la tarde.

Casal del Nadal, Expo-museo de la Navidad.

Para finalizar este recorrido descubriendo la Navidad en Alcoy no podía faltar la visita al Casal del Nadal, donde está el Expo-museo de la Navidad, ubicado en la antigua capilla de la Virgen de los Desamparados.

Casal del Nadal, Expo-museo de la Navidad.

Es aquí donde podréis descubrir el mágico espectáculo con el que Alcoy celebra la llegada de la Navidad, “Les Pastoretes”, “El Bando”, "La Cabalgata de Reyes Magos" o el entrañable “Betlem de Tirisiti”, esa representación de títeres de varilla de aspectos costumbristas y festivos que por la tarde pudimos ver, los cuatro pilares de la Navidad de Alcoy, y aprenderéis más sobre ellos a través de exposiciones, vídeos, objetos, carteles, y cómo no, juegos para los niños.

Restaurante La Raconà, en la calle San Francisco 26 de Alcoy.

Se hizo la hora de comer, y nos dividimos en dos grupos, siendo nuestro restaurante La Raconà, en la calle San Francisco 26.

Los primeros platos del Restaurante La Raconà.

Allí pudimos degustar muy buena comida de cocina fusión, con una alta calidad de productos y una elaboración exquisita e innovadora.

Nuestro menú en el Restaurante La Raconà.

Empezamos con un aperitivo de bienvenida, una crema de calabaza que estaba riquísima, para continuar con los entrantes a modo de tapas para compartir, que consistieron en huevos abisinios líquidos; coca crujiente con escalivada y jamón; gyozas de magro y verduritas; salteado de judías verdes con jamón; y para finalizar puerros asados con salsa de miso y katsuboshi.

Surtido de postres del Restaurante La Raconà.

El postre fue variado y consistía en un tiramisú hecho con café licor (típico de esta zona); tarta de manzana y crema pastelera; y tostadita con chocolate aceite y sal.

Restaurante La Raconà, en la calle San Francisco 26 de Alcoy.

Fue nuestra primera vez en La Raconà, pero seguro que no tardaremos en volver, Alcoy tiene mucho que ofrecer, de hecho de las cuatro veces que hemos venido no hemos repetido ninguna visita, y todavía nos queda por descubrir.

Refugio Antiaéreo de Cervantes, Alcoy.

Por la tarde teníamos otra visita programada, turno para conocer el Refugio Antiaéreo de Cervantes, uno de los más de 25 refugios que los alcoyanos usaron para resguardarse de los ataques aéreos durante la Guerra Civil española.

Refugio Antiaéreo de Cervantes, Alcoy.

Este refugio subterráneo de más de 100 metros de longitud posee una colección de objetos y paneles con datos y fotografías aéreas de los ataques de los bombarderos italianos Savoia 79, y en sus 292m² puede albergar a 1.166 personas y una superficie de. Finalizamos la visita viendo las paredes del antiguo colegio Cervantes, donde pueden observarse con mucha claridad los cuantos impactos de metralla que hay en el muro.

Mercado Navideño de Alcoy.

Después nos acercamos hasta el Parque la Glorieta, bajo el que también hay un refugio antiaéreo, pero en esta ocasión fue para visitar el Mercado Navideño de Alcoy, donde además de las 40 casitas en las que se ofrecen productos navideños, hay una ludoteca gratuita con juegos de mesa, rompecabezas, estructuras musicales y juegos de destreza, un photocall navideño, talleres de artesanos con trabajos demostrativos en distintos materiales, y un sinfín de actividades paralelas en las que se incluyen espectáculos de magia, cuenta cuentos y actuaciones musicales.

Alcoy, Restaurante Sant Francesc 52.

Nuestra cena fue en el Restaurante Sant Francesc 52, en el que ya habíamos comido antes, y yo llevaba toda la tarde hablando de la comida de este lugar con mis compañeros, pues tenía muy buenos recuerdos de la misma.

Nuestro menú en el Restaurante Sant Francesc 52.

El menú fue también a base de varios platos para compartir, empezando por la ensaladilla de merluza; las virutas de foie a la sal con compota de higos; y carpaccio de gambas con aceite de oliva, huevas y esferas cítricas.

Nuestro menú en el Restaurante Sant Francesc 52.

Una vez más disfrutamos de las charlas viajeras con nuestros compañeros mientras degustábamos la típica pericana de la zona (a base de pimiento rojo seco y bacalao); la tapa ganadora marco del concurso Tapas d'Ací de la Comunidad Valenciana, la coca de espinacas con alioli gratinado, caballa en semisalazón y crema de pimentón, una combinación 100% valenciana; para seguir con unas setas con longaniza y huevo.

Nuestro menú en el Restaurante Sant Francesc 52.

Seguidamente trajeron una Lubina crujiente a las hierbas de Mariola mientras mis compañeros me daban la razón en cuanto a "lo pesado" que había estado diciéndoles: "ya veréis qué bien comemos en el Restaurante Sant Francesc 52".

Nuestros postres del Restaurante Sant Francesc 52.

Nuestros postres del Restaurante Sant Francesc 52.

Los postres esta vez sí que me apetecían, así que los probé todos, los seis que nos sacaron, mi favorito fue el semifrío de turrón con galleta caramelizada, pero cada uno tenía el suyo, así que no coincidimos en eso, pero sí en lo deliciosos que estaban.

Las vistas de Alcoy desde la Masía La Mota.

Alcoy, hotel con encanto Masía La Mota.

Finalizaré el relato con nuestra experiencia en el hotel con encanto de Masía La Mota, lo bueno se hace esperar...ja, ja, ja.

Nuestra habitación en la Masía La Mota.

Alcoy, hotel con encanto Masía La Mota.

No he empezado el relato por aquí porque llegamos por la noche, y como el viaje terminaba con una cata de aceite de oliva aquí, he visto conveniente unirlo todo en estas líneas.

Alcoy, hotel con encanto Masía La Mota.

Alcoy, hotel con encanto Masía La Mota.

Masía la Mota está situada a pocos kilómetros de Alcoy, en pleno Parque Natural de la Font Roja, en una zona privilegiada con vistas de gran belleza, y desde la primera vez que vine a ver este alojamiento que tenía ganas de alojarme allí.

Alcoy, hotel con encanto Masía La Mota.

Indira y su marido compraron, rehabilitaron y restauraron esta antigua masía de campo del s.XVII para vivir en ella, pero más tarde decidieron abrir el alojamiento para poder sufragar parte de los gastos que tiene una vivienda de estas características, de modo que gracias a eso podemos disfrutar los huéspedes y visitantes de este hotel con encanto que parece un museo.

Alcoy, hotel con encanto Masía La Mota.

Tras la visita guiada a la masía paramos a una sala para realizar una cata de aceite de oliva, la cuarta vez para mi después de haber hecho una cata de aceite aquí mismo en el anterior blogtrip, una en Nyon (Francia) y otra en Traiguera (Castellón), pero si nunca habéis realizado una cata de aceites, podríais solicitarlas en la Masía La Mota, pues son productores y probaréis aceites de km 0, naturales y sostenibles, así también aprenderéis cómo se hace una cata de aceite y qué buscar en la misma.

Cata de aceite en el hotel con encanto Masía La Mota.

Hay pocos lugares donde poder hacer una cata de aceite oliva virgen extra premium que proviene de los propios árboles centenarios ubicados en la misma Masía la Mota, árboles centenarios ubicados en las laderas del Parque Natural de la Font Roja, para lo que no se usa ningún tipo de pesticidas ni productos contaminantes, lo que se convierte en un aceite de gran calidad.